Educación
La fantasía de la literatura en la Casa del abuelo
Abrir un libro es acceder al mundo de las ideas, donde la palabra suscita coloridos pensamientos y la imaginación se torna en realidad al compás de las letras. El que lee edifica su mente, halla luz en los oscuros pasajes y guía en los confusos laberintos de la vida.
La promoción de la lectura es una labor que, poco a poco, se abre espacio en Valledupar, ya sea en las diferentes bibliotecas públicas, en eventos como el Festival del Libro Infantil o a través de talleres como el que es objeto de este reportaje.
Natalia de la Torre es una bogotana de 37 años, comunicadora social, que lidera un ciclo de talleres titulado “La Fantasía en la Literatura”. Su función es llegar a poblaciones que difícilmente pueden acceder a los libros y motivarlos a la lectura; con ese plan visitó este mes de noviembre la Casa del Abuelo, para contagiar con su actitud dinámica y positiva a sus tranquilos habitantes.
El relato satírico japonés “La Nariz” de Ryunosuke Akutagawa, fue una apertura conmovedora. Luego, con la atención y el sosiego propio de la edad de los oyentes, siguieron la narración convirtiéndose en lectores y logrando vencer en muchos casos las limitaciones de sus ojos.
Una partida de Scrabble sirvió para animar la actividad, con palabras sacadas del relato los abuelos organizaron sus fichas y entre risas ubicaban “largo”, “embutido”, “feo”, según las características físicas de “Zenchi” el sacerdote de enorme nariz, protagonista de la historia.
Hace seis años, Natalia inició su oficio como promotora de lectura y en este tiempo ha llevado sus talleres a varios zonas del país, ésta es la segunda vez que visita Valledupar y sobre esta experiencia comenta: “trabajar con la tercera edad es una tarea que me da gran satisfacción, son personas que necesitan atención y cuando se les da, devuelven una sonrisa que retribuye con creces el esfuerzo que realizo; aunque esta vez ha sido mucho más difícil que el año pasado, después de todo no es igual pasar de 20 a 21 que de 80 a 81”.
Saber llegar a la gente es esencial en este tipo de tareas; adaptar el lenguaje, el método y la actitud al público para que capte un mensaje, piense y se una al diálogo animadamente es la habilidad que caracteriza a un verdadero docente, y puede decirse que Natalia de la Torre lo logra, al incorporar en su discurso ayudas pedagógicas de diferente naturaleza, pero armónicamente combinadas.
Al final, una lluvia de agradecidos aplausos despidió a una mujer decidida a transmitir el amor por la lectura, y a dar la oportunidad de sentir que siempre es posible disfrutar de ella sin limitaciones.
José Luis Ropero de La Hoz
Sobre el autor
José Luis Ropero de La Hoz
Enfoque directo
Valledupar (1985). Profesor y comunicador por vocación, su columna “Enfoque directo” ofrece una mirada del acontecer cultural sin formalismos. Admirador de la naturaleza y el talento humano.
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