Música y folclor
¿Cuánto cuesta este carro? Una anécdota de Diomedes y su chófer
Las salidas del Cacique. Una vez viajaba Diomedes Díaz en su caravana regresando de una gira de conciertos, conducía su chófer de confianza y de siempre: Álvaro Daza.
En un momento de la carretera, delante de su camioneta 4x4, viajaba un vehículo de marca KIA que los vehículos de Díaz no adelantaban. En ese instante, expresa el Cacique de la Junta a su chófer, Varo –como lo llamaba cariñosamente–: “Ese carro que llevamos delante, ¿qué marca es?”.
Su conductor extrañado, pero sabiendo las jocosidades de su patrón, responde serenamente: “Es un KIA, maestro”.
Vuelve y pregunta el cantante: “¿Y qué vale ese carro, Varo?”. Su compañero de carretera responde con duda –pero esperando una de sus salidas que siempre acostumbraba–: “Vale como 30 millones, Cacique”.
El papá de los pollitos se queda tranquilo, pero al ver que seguía sin adelantar continua con sus preguntas llenas de chispas: “Varo, y este carro en que vamos, ¿qué marca es?”.
Ya Alvarito, tranquilamente y sabiendo que en cualquier momento tiraba la salida, responde: “Patrón, esta es la suya, una Toyota Land Cruiser, la mamá de los carros al estilo de usted”.
Insiste Diomedes en molestar a su chofer: “¿Y qué costó este carro?”. Automáticamente, responde Daza: “Éste vale 180 millones maestro, es la mampana”.
Ya llegando el tan esperado momento de la salida, el Cacique responde con un tono fuerte –como siempre lo hacía–: “Entonces, por qué no te pasas esa verga, si éste es más caro”.
Estas son las historias de Diomedes que yo llamo “Las salidas del Cacique”. Como pueden ver, las salidas de Diomedes eran únicas.
Toño Cacique
@AntonioJDeleon
0 Comentarios
Le puede interesar
Arranca la promoción del 48 Festival de la Leyenda Vallenata
La promoción del Festival de la Leyenda Vallenata no suele dejarse para el último momento. Apenas cuando faltan seis meses y medio p...
Un Festival de música caribeña en Valledupar: ¿sueño o realidad?
Durante los días del Festival Vallenato, el gestor cultural Alejandro Gutiérrez de Piñeres se desplazó a Valledupar con el fin de p...
La Ciencia y el Vallenato
En un debate sostenido en un grupo de Facebook, dedicado a la música vallenata, entre la barahúnda de comentarios, se planteó al...
La noche en que Carlos Vives soñó con vallenatos
Este no fue un sueño triste como el de Calixto Ochoa. Fue un sueño agradable en un cuarto particular, ubicado en el centro de u...
La Guillermina y el travestismo en el Son de Negro
“Mi nombre no es común, Abilio, no sé de donde lo sacaron mis papás porque nadie en mi familia se llama así, y creo que en es...