Música y folclor
Rosendo Romero: “Los jóvenes están en Internet. Prefieren el facilismo”
Invitado a un conversatorio sobre el estado de la música vallenata, en el marco de los 465 años de la ciudad de Valledupar, el compositor Rosendo Romero se expresó abiertamente sobre las problemáticas que afronta el folclor y la composición.
En un escenario donde también estaba presente el periodista Alberto Salcedo Ramos, el compositor subrayó la importancia de los modelos que persigue uno como artista para mejorar en su arte y contribuir a la evolución del género.
“Se me ocurrió que tenía que ser como Gustavo Gutiérrez para quitarme el clavo de que Israel (su hermano) iba a ser como Alfredo Gutiérrez”, comentó él.
Desde sus inicios, la poesía y la seducción han sido dos constantes de la música vallenata. En su juventud, cuando todavía no existía la televisión, Rosendo Romero trató de mejorar su nivel de composición para responder a los anhelos de una mujer. El amor fue un acicate para la producción literaria y musical.
“Cuando decido hacer una canción en serio es porque una mujer me la pidió: La custodia de Belén”; reveló el músico.
Más adelante, Rosendo se esmera en progresar persiguiendo la constancia y la excelencia. El oficio va entrando con el esmero y el mejor manejo de la palabra. “Descubro que tengo capacidad para la poesía con “Sueño de conquista” –comenta el compositor–. Entonces, empiezo a leer, acompaño a Leandro Díaz… A Leandro Díaz le pregunté muchas cosas, y más tarde, Escalona, Emiliano Zuleta…”
Y justamente, ese empecinamiento en superarse y descubrirse una vocación poética es lo que se ha perdido en el Vallenato. Las producciones se han aligerado de tal modo que llegan al mercado temas como “La yuca y la tajada” –discutida en ese mismo conversatorio- , y que brillan por su falta de originalidad y la ausencia de poesía.
“No ha habido evolución en lo que se está cantando –sostiene el compositor guajiro– […] Esto es colectivo. Es todo un colectivo el que está macerando el conocimiento del sonido”.
Según Rosendo Romero, un gran motivo de este estancamiento y de la posterior deriva es el poco conocimiento que hay acerca del género que nos interesa. “Muy pocos conocemos nuestra música”, explica antes de recordar los 4 aires que son el fundamento del género vallenato. Lo que no entre en ese orden de ideas, no es música vallenata.
La gran preocupación del compositor reside en las generaciones futuras. “Cuando ya no se trabajan las figuras literarias, cae la canción vallenata –expresa Rosendo y más adelante añade–: Los jóvenes están en Internet. Prefieren el facilismo”.
PanoramaCultural.com.co
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