Música y folclor

Dos grandes juglares que perdimos

Jorge Nain Ruiz

29/09/2017 - 04:10

 

Samuel Martinez Muñoz y Julio de La Ossa Domínguez

 

En esta semana que culmina, se conmemoró un aniversario más del fallecimiento de dos grandes y verdaderos juglares de nuestro folclor: el primero fue el juglar de mi pueblo La Loma de Potrerillo, Samuel Martínez Muñoz, a quien el periodista Juan Rincón Vanegas le dedicó una de sus más hermosas crónicas el pasado 27 de septiembre, fecha en la cual cumplió 13 años de fallecido.

El segundo fue el gran Julio de la Ossa Domínguez, rey del Festival de la Leyenda Vallenata (1975), más conocido con el remoquete artístico de “El pequeño gigante del acordeón”, quien falleció el 28 de Septiembre de 1998, un compositor, acordeonero, verseador y cantante de un nivel excepcional.

Estos dos pilares de este folclor tienen más que merecido que hoy les dediquemos esta entrega y los recordemos con la grandeza que llegaron a conquistar a punta de versos, canciones y acordeón y que dejaron un legado cultural imborrable por décadas y siglos en la mente y el corazón de los colombianos.

Primero hablemos de sus obras. “Samuelito” compuso muchísimas canciones que grabaron entre los primeros intérpretes del vallenato; sin embargo, algunas de ellas ni siquiera aparecieron con su debido crédito, porque recordemos que en esa época ni el compositor se preocupaba por sus derechos de autor, ni el intérprete buscaba apoderase de regalías y derechos, simplemente de buena fe se incurría en ese tipo de errores.

Pero sin duda la canción que a Samuel Martínez lo encumbró y lo puso en el lugar de los grandes compositores fue el paseo La loma, que inmortalizó Alfredo Gutiérrez y a la que luego le hicieron versiones grandes cantantes como Jorge Oñate y Silvestre Dangond;  “Samuelito”  también se dio a conocer con el merengue Potrerillo que grabara Bovea y sus vallenatos inicialmente, luego el opita de oro Jairo Serrano y muchos otros intérpretes. En La Loma el nombre de Samuel Martínez no se podrá olvidar, porque el festival del  pueblo lleva su nombre.

Si hablamos de Julio de la Ossa, el hijo de Chochó Sucre, tenemos que este gran Rey vallenato se inició tocando porros y cumbias, la música de su región; conoce a Calixto Ochoa y este lo lleva a integrar los Corraleros de Majagual, la agrupación más importante de la música del Caribe para esa época. En 1963 se va a vivir a Valledupar  y es allí donde nacen la mayoría de sus hijos; muchos de ellos heredaron su vena artística y hoy sostienen una dinastía.

Participó en la categoría de acordeoneros profesionales en el Festival Vallenato seis años consecutivos y en todos logró estar en el podio, hasta que en el año 1975 se coronó Rey Profesional, su canción más importante es: La colegiala, grabada inicialmente por el mismo y luego éxito nacional con el Binomio de Oro.

El pequeño gigante del acordeón compuso también un tema que luego se convertiría en una de las canciones más interpretadas en todos los festivales vallenatos llamada La margentina, cuya música es empleada regularmente como base para los concursos de piquería.

Estos dos grandes juglares de nuestro folclor hacen parte de la hermosa historia de la cultura caribe y vivirán por siempre en nuestros corazones.

 

Jorge Nain Ruiz

@jorgenainruiz  

Sobre el autor

Jorge Nain Ruiz

Jorge Nain Ruiz

Vallenateando

Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.

@jorgenainruiz

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

La historia se repitió con el mismo nombre, Martín Elías

La historia se repitió con el mismo nombre, Martín Elías

  El número 26 es el que marca la alegría y el dolor en la familia Díaz. Un 26 de mayo de 1957 nació el cantautor Diomedes Día...

La Paz celebra las victorias de su escuela musical

La Paz celebra las victorias de su escuela musical

Es cierto que el 46 Festival Vallenato fue la vitrina de los mejores acordeoneros y compositores de la región pero también, y hay que...

El folklore vallenato (Parte II)

El folklore vallenato (Parte II)

Ya mencionamos que la música vallenata se origina desde el siglo pasado, cuando se expande por las zonas campestres y pequeños pueb...

Los Niños Vallenatos y su conquista del viejo continente

Los Niños Vallenatos y su conquista del viejo continente

El asalto al viejo continente se hizo de manera pacífica, con los argumentos de la Cultura y del folclor vallenato, con las alegrías ...

Rosendo Romero: el ilustre poeta de la “Noche sin luceros”

Rosendo Romero: el ilustre poeta de la “Noche sin luceros”

  Mientras  la gran mayoría de los poetas,  y mucha  gente del común, suele coger la claridad e imponencia de la luna y las noch...

Lo más leído

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

Los Pacabuyes: ¿un pueblo Chimila o Malibú?

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Pueblos

La magia de Escalona

Alberto Muñoz Peñaloza | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

El Vallenato de Rafael Escalona

Darío Blanco Arboleda | Música y folclor

Armando Zabaleta: el fecundo compositor de “No voy a Patillal”

Eddie José Dániels García | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados