Música y folclor

Ahí vas Paloma o el clásico vallenato por antonomasia

Orlando Molina Estrada

25/11/2022 - 05:10

 

Ahí vas Paloma o el clásico vallenato por antonomasia
El cantautor Chiche Maestre, autor de la canción "Ahí vas paloma" / Foto: diomedesdiaz.co

 

La canción vallenata “Ahí vas paloma“ y la colosal interpretación de Tomás Alfonso Zuleta en los fuelles de Emilianito, salió al mercado discográfico en el año 1996, incluida en el disco “Siempre vallenato”, donde aparecieron once canciones pertenecientes a los más selectos autores vallenatos. De entre ellas, cabe mencionar la remasterización de “La llorona loca,” del maestro José Barros, “Tu forma de amar,” del urumitero Fabián Corrales y “Claudia,” de la autoría del mismo Poncho. De entre estos temas, “Ahí vas paloma” se desprendió como el éxito más destacado del larga duración, sencillo que valió la atención de Consuelo Araujo Noguera, quien pronosticó que, debido al tono melancólico y el aprecio de las metáforas propias de quien fuera su creador, sin duda la canción iba a constituirse en un clásico vallenato, y que, a pesar de estar inscrito en el estilo de un autor joven -que acaso alcanzaría los  30 años-, no disonaba con las características canónicas del vallenato narrativo-lírico tradicional.

La sorpresa de Araujo no debió ser únicamente el componente poético de la pieza, compuesta por el patillalero José Alfonso “Chiche Maestre”, que se constituiría en la banda magistral de muchos despechados, sino el contexto en el que cobraba relevancia una canción de semejante temple de ánimo, donde el gusto interiorano del país había demandado un vallenato de menos densidad “folclórica”, ya con una fuerza comercial instaurada. La canción era, entonces, una muestra que en el género de La región de Padilla había para más y que sus cultores mantenían aún una musa alerta que era preciso enaltecer a través de los comentarios de una autoridad cultural como lo fue la Cacica. Los aplausos por parte del público no se hicieron esperar y se consagró en el éxito por antonomasia de Poncho, debido a las exigencias tonales, la correspondencia con el acordeón de Emilianito y la relación establecida entre la letra como artificio poético y la cuota íntima de las vivencias de su autor, que relucieron inmediatamente en la farándula regional, sin que ello fuera para ese momento el verdadero interés que despertó en la audiencia el nombrado éxito musical.

No obstante, la canción como documento demostrable –sin que esté obligado a hacerlo- motiva y revalida el análisis literario, trascendiendo así su ficcionalidad y garantizando su posición en una dimensión histórica y cultural de más rango como es frecuente en las piezas de este género que han pasado a la posteridad. Con “Ahí vas paloma” sucede algo similar, pues inscribe a sus protagonistas en un referente creíble de acontecimientos. En distintas entrevistas concedidas por el autor, se ha establecido los motivos que inspiraron la canción, reflejados en una historia personal en la que él mismo ha reconocido en la destinataria de los versos a la presentadora Chata Riaño con quien viviera una relación para nada ajena al mundo vallenato. Al parecer, los términos en que transcurrieron los hechos no pasaron desapercibidos para la sensibilidad de José Alfonso, que en canciones anteriores ya había cifrado en melodías el fruto de sus amores imposibles. Se infiere perfectamente que no fue para nada normal la consumación de su romance, pero por modestia, los personajes reales han suavizado esta versión, contrastando en modo intencional lo dicho en los versos resentidos de la canción.  

Luego de 24 años, a la mejor usanza de las casi ya bodas de plata y no a los 18 donde prematuramente quedan relegadas camino a la consagración otras producciones recientes, la canción ya disfruta de su mayoría edad, enmarcada en el referente cultural vallenato y con vigencia para el público actual. Esta consagración no está enteramente sujeta a los comentarios de Araujo Noguera, sin desconocer el mérito que imprimieron sus palabras, sino a la misma fuerza que se deriva de sus versos, en la que nos presenta un yo lírico enérgico de sentimiento en la soberbia interpretación de Los Zuleta. Seis estrofas divididas en dos partes por un interludio de brava ejecución del acordeón y sus respetivos coros fueron suficientes para condensar ese “huracán de sentimientos” que afianzara más la mala suerte del autor de los “amores imposibles”.

Lo planteado en “Ahí vas paloma” se inscribe en una dimensión de amores frustrados, donde el compositor expresa la situación en la que no es correspondido, haciendo uso de un tono desgarrador, en el que ha sido en vano la lucha por sus anhelos. En la canción es palpable esta realidad desde los primeros versos, donde resalta como temática general la insistencia fallida, la desesperanza y el dolor por mantener la relación a pesar de haber tantos reproches: Yo he perdido por ti hasta mi suerte / yo he perdido por ti todos mis días / me propuse entenderte como fuera / pero no resultó, vean qué manera / de acabar con lo poco que tenía.

 Se enuncia en tono hiperbólico la pérdida de los días y la suerte, muy a pesar de la constancia empleada por entender al ser amado, en lo que se termina perdiendo lo poco que había. Esta atmósfera de desconsuelo se percibe en todo el cuerpo de la pieza, en un tono que ratifica el sufrimiento, la pérdida del orgullo y el vacío dejado por la desesperanza donde antes se podría esperar algo teniendo en cuenta lo que la situación de insalvables reproches proponía. Claramente, el hablante lírico en medio del “huracán de sentimientos” y mentiras que consintió esperó un cambio: Yo esperé hasta el final si es que cambiabas / tu manera de amarme con reproche / pero me fui imposible dominarte / todo lo que te di, tanto adorarte / se quedó en un rincón aquella noche.

En la brevedad del canto, que alcanza 4:30 segundos, hay tiempo para los cambios melódicos en los que se inscribe una entonación cada vez más desgarradora, donde el lamento se agudiza, la voz casi revienta y las imposibilidades de un desenvolvimiento feliz se re-signan, mostrando en la “paloma” una faceta incorregible donde nunca se sacian los alcances destructores de su vuelo, pues esta sigue “buscando rumbos, otro pecho, otro amor, otra herida”.

Para la época, el tema significó un llamado al sentimiento desde las voces nuevas de la composición. Razón tenía Consuelo Araujo cuando hace ya dos décadas sostenía que “Ahí vas paloma” estaba destinada a convertirse en un clásico con todos los honores del caso.

 

Orlando Molina Estrada

Sobre el autor

Orlando Molina Estrada

Orlando Molina Estrada

Sal y sol

Orlando Molina Estrada (1985), nacido en San José de Saco, Atlántico, Licenciado en Humanidades y Lengua Castellana y Maestrante en Literatura hispanoamericana y del Caribe de la Universidad del Atlántico. Investigador de la cultura vallenata y temas relacionados con la música como eslabón en el proyecto Estado-nación. Actualmente, se desempeña como docente y adelanta estudios sobre la obra del compositor Rafael Manjarrez Mendoza en calidad de tesis de maestría.

4 Comentarios


Jairo 25-11-2022 07:52 AM

Qué es el género de la región de Padilla?

Enaldo torres guerra 26-11-2022 07:53 PM

Un exelente tema .una de las mejores interpretaciones de poncho con un gran sentimiento que solo quien no a tenido un desamor no entiende la calidad expresada en esta magistral obra..

H. Molina 27-11-2022 09:32 AM

Excelente artículo, su análisis es fundado en el asertivo acervo probatorio del Tiempo, El cual, solo las hace perennes las buenas obras, sean cual sean los motivos de sus creadores.

Guillermo de la cruz 28-11-2022 11:02 PM

Según, esa cancion, la escribió el autor por una infidelidad

Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

La Piqueria infantil se gana un espacio en el Festival de la Leyenda Vallenata

La Piqueria infantil se gana un espacio en el Festival de la Leyenda Vallenata

  Tras exponerse con brío en el Festival Tierra de Compositores de Patillal a finales del 2017, la Piqueria infantil ha ganado ade...

Un legado para honrar el movimiento de caderas de las abuelas

Un legado para honrar el movimiento de caderas de las abuelas

En la tercera vigilia, se paraban de la cama y se dirigían a la cocina para emprender la faena de pilar el maíz. El canto de los ga...

La Salsa en Puerto Rico: los inicios de un gran fenómeno

La Salsa en Puerto Rico: los inicios de un gran fenómeno

  A diferencia del ambiente de la diáspora latina y especialmente de la colonia boricua en Nueva York, Puerto Rico no desarrolló ta...

Edinson Brito y Franklin Vega, a la conquista del Valle de Upar

Edinson Brito y Franklin Vega, a la conquista del Valle de Upar

Su voz le hizo ganar el título de Padrino hace muchos años en una parranda,  y desde entonces es el apodo con el cual todo el mundo ...

Samuel Antonio Martínez Muñoz, rey en su patio

Samuel Antonio Martínez Muñoz, rey en su patio

  El sábado dos de septiembre de 1922 nació en La Loma, hoy corregimiento del municipio de El Paso (Cesar), el juglar Samuel Antoni...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados