Ocio y sociedad

El encuentro con el Santo Ecce Homo y los detalles de una veneración

Redacción

14/04/2014 - 11:40

 

El encuentro con el Santo Ecce Homo y los detalles de una veneración

El Santo Ecce Homo. Obra de Armando IguaránDe cómo nació la leyenda del Santo Ecce Homo en Valledupar existen muchas versiones, aunque suele prevalecer la versión de un artesano trabajador y solícito, quien, después de encerrarse durante varios días en un taller, desapareció dejando como único rastro una figura que hoy es objeto de devoción en la iglesia Inmaculada Concepción.

Ecce Homo se traduce como “He aquí el hombre” en castellano, frase que pronunció el gobernador romano de Judea, Poncio Pilato, cuando presentó a Jesús de Nazaret ante la muchedumbre para eximirse de toda responsabilidad sobre el devenir de Jesucristo.

Momento crítico de la Semana Santa, el encuentro con el Santo Ecce Homo recrea una imagen de innegable angustia y congoja. Jesucristo acaba de pasar por el peor de los sufrimientos y humillaciones – la atadura a la columna, la flagelación y la coronación de espinas (el orden puede variar)–, para terminar frente a una muchedumbre desagradecida que decidirá sobre si debe seguir vivo.

El destino de Jesucristo parece inalterable.  La cruz se hace más cerca, y el deterioro se ve confirmado en el físico del hijo de Dios. En este caso, la frase “Ecce Homo” se asemeja a una sentencia.  De ahí, la fuerza simbólica del reencuentro con el Santo. Es un punto de inflexión y de reconciliación.

En Valledupar, esta ceremonia puede reunir a más de 20.000 personas procedentes de todo el departamento del Cesar. El poder de convocatoria del Santo Ecce Homo es a menudo objeto de análisis y consternación.

Otras ciudades colombianas como Popayán, El Tambo, Silvia o Ricaurte (Nariño) también rinden culto al Santo Ecce Homo, pero es Boyacá y la iglesia de Sutamarchan quienes cuentan con la imagen más antigua de Colombia.  Se estima su año de elaboración en 1527.

Todas las representaciones escultóricas del Ecce Homo mantienen una similitud: son imágenes habitualmente sentadas y vestidas (o semi-vestidas), con túnicas de finas telas con bordado de oro representativo de la región.

 

PanoramaCultural.com.co

 

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Brillantes debuts de Erling Haaland

Brillantes debuts de Erling Haaland

  El comienzo de la temporada es un momento difícil para muchos jugadores. Incluso algunas de las principales estrellas luchan por c...

Las maras en Centroamérica

Las maras en Centroamérica

Buscar información acerca de las maras, pandillas o delincuencia juvenil puede ser un arma de dos filos, en la mayoría de textos tr...

Angie Castrillón Briasco: esperanza de las nuevas generaciones

Angie Castrillón Briasco: esperanza de las nuevas generaciones

  Marzo es el mes de las mujeres, tiempo propicio para continuar afianzando la premisa de que todas las mujeres merecen trascender de...

Distintas formas de celebrar el año nuevo

Distintas formas de celebrar el año nuevo

  Comer las uvas mientras suenan los doce campanadas, vestir ropa interior de color amarillo, salir a la calle con una maleta, o colo...

Amira Sarquís, una emprendedora que quiere inspirar a las juventudes

Amira Sarquís, una emprendedora que quiere inspirar a las juventudes

  Inspirada en la autenticidad de la mujer latina y empeñada en hacer de su proyecto personal ‘Gitana’ una marca de prestigio ...

Lo más leído

¿Qué es la oralidad?

Javier Zamudio | Patrimonio

Vida y trayectoria de Rafael Pombo

Redacción | Literatura

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

La parranda vallenata como un ritual de amistad

María Ruth Mosquera | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

La parranda y el parrandero en la música vallenata

María Emilia Aponte Mantilla | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados