Ocio y sociedad

Los calzados atados a un cable, una nueva moda en Valledupar

Redacción

14/06/2012 - 11:00

 

Existe todo tipo de modas, algunas más insólitas que otras, pero la que les vamos a contar no tiene ninguna comparación.

En los últimos meses se ha visto en la ciudad de Valledupar un número apreciable de zapatos atados y colgados en los cables eléctricos que recorren nuestras calles. En muchas ocasiones, estos pares se encuentran en lugares casi imposibles de acceder, a alturas despampanantes que infundirían miedo a cualquiera.

Pero no se vayan a creer que estos zapatos llegan ahí por arte de magia. En realidad se trata de una moda que nació hace varios años en Estados Unidos y que consiste en atar por los cordones un par de zapatos y lanzarlos al aire hasta lograr engancharlos en los cables eléctricos o telefónicos de las calles.

Algunas leyendas urbanas dicen que conseguir que los zapatos queden colgados en los cables genera mucha suerte. Otras hablan de felicidad o de sexualidad renovada. Pero eso es lo que cuentan las leyendas porque si hablamos con personas de las ciudades afectadas por este problema la respuesta es totalmente distinta.

En Estados Unidos y de Europa, este fenómeno se ha convertido incluso en una verdadera epidemia. El caso de ciertas ciudades españolas, francesas o italianas –donde las autoridades retiran de los cables centenares de pares por semana– es un claro ejemplo de lo problemática que puede convertirse esta moda.

En esas tierras lejanas, la cosa se ha vuelto tan exagerada que cualquier calzado (sea tenis, botas, chancletas, sandalias e incluso botas de ski) puede convertirse en un objeto para “tirar y colgar” en lo alto de unos cables eléctricos.

De momento, en Valledupar, esta moda se vive de manera alegre y sosegada, como suele pasar cuando las modas sólo empiezan. En nuestra exploración descubrimos frente al Coliseo un lugar propicio para el “lanzamiento” de calzados.

Allí encontramos un grupo de jóvenes que sonríen cuando les preguntamos por esos calzados colgantes. Juan José y Mileidis nos contestan que nunca habían escuchado nada acerca de este tipo de prácticas. “La gente anda loca. No tienen más nada que hacer”, añade Mileidis con una sonrisa burlona. “Tienen una puntería impresionante”, comenta Juan José aterrado.

Un poco más lejos, nos encontramos con otros jóvenes. Carlos Alberto y Rosa conforman una pareja aparentemente más informada sobre este asunto. “Conozco a un tipo que quiso impresionar a los amigos  –explica Rosa–. Era tarde en la noche y le dio por quitarse los zapatos casi nuevos. Los tiró y de primera se quedaron colgados. Luego, el hombre volvió descalzo a casa. Los compañeros se burlaban de él”.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Los arrebatos del profesor Moisés

Los arrebatos del profesor Moisés

  Hace casi cuatro décadas, recién fundada la Universidad de Sucre, llegó a laborar en esta institución el profesor Moisés Escor...

Crear riqueza a los 30 años

Crear riqueza a los 30 años

  Si bien puede haber iniciado su carrera y haber encontrado una cierta estabilidad, una vez que llega a los 30, todavía no es tan f...

Los videojuegos también son cultura

Los videojuegos también son cultura

¿Quién de nosotros no ha escuchado alguna vez el nombre de Mario Bros o Sonic? ¿Quién no se ha encontrado frente a una consola part...

El Cesar y La Guajira resignifican sus espacios de encuentro

El Cesar y La Guajira resignifican sus espacios de encuentro

En los barrios Lorenzo Morales, de Valledupar y Villahermosa, en Fonseca, se fortalece el tejido social mediante jornadas sociocultur...

Iliana Curiel: una mujer de éxito

Iliana Curiel: una mujer de éxito

Reunirse es un comienzo, permanecer juntos en un progreso,  trabajar juntos es el éxito.  Henry Ford La guajira es un vientre ...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados