Opinión

Dolor de patria

Eber Patiño Ruiz

02/08/2017 - 06:25

 

 

Si hay una situación verdaderamente lamentable para un ser humano, es tener que abandonar el lugar donde vive, donde tuvo una familia, un proyecto de vida, sueños y esperanzas y de la noche a la mañana tener que dejarlo todo para iniciar una nueva vida, es la sensación de pérdida más traumática que experimenta el hombre y sentir que no es de ningún lugar, que donde vaya es un forastero, un paria, un ser perdido entre la multitud.

Ese dolor de pérdida no se borra nunca de la mente, así se prospere en otras tierras, por eso cuando una persona ha sido desplazada de su tierra, de su parcela, casa o país, el alma se arruga y las lágrimas duelen.

Y eso es precisamente lo que han vivido miles de colombianos, que han tenido que huir de sus sitios de origen, a veces solo con la ropa que llevan puesta y otras veces con la caja de cartón al hombro.

Pasar de tenerlo todo a no tener nada, es un abismo tan grande de entender que son muchos los que optan por el suicidio, el abandono de sus hijos y esposas, y entonces se agrava aún más la situación y la poca capacidad de raciocinio que queda se nubla, que pierde los estribos y aflora la ira y la desesperanza, ya no hay voluntad, sino que se obra por instinto de supervivencia, porque cuando el hambre acosa, el mundo es de otro color.

Esa pérdida es en efecto una verdadera caja de pandora, de ella nacen, la delincuencia, el robo, la prostitución, y demás males sociales que padece la sociedad moderna. Perder el tejido social que sopesa la familia, es perder el Norte, porque no habrá un lugar donde se pueda cultivar los valores y los principios que rigen el buen vivir y por ende el desarrollo de una sociedad.

Y ese dolor es justo lo que hoy viven en carne propia los venezolanos, al abandonar el país que en su momento les dio todo, y que ahora ya no tienen nada, salvo cruzar la frontera y esperar lo que el destino tiene predispuesto para su país y poder regresar y volver a empezar de nuevo, pero en su tierra y no en un lugar ajeno, prestado y de paso cargar con el problema de la estigmatización y odios rancios desde los tiempos de la colonia.

El tiempo que dure el problema político en su país, será un verdadero calvario, un peregrinar espino, pero a la vez será una lección de vida para las generaciones venideras, para que no vuelva a pasar la pesadilla que ellos están viviendo.

Esta será una página en sus vidas que a muchos fortalecerá y saldrán adelante, para otros será hasta el día de sus muertes lo peor que les pudo haber pasado en este soplo llamado vida.  

 

Eber Patiño Ruiz

 

Sobre el autor

Eber Patiño Ruiz

Eber Patiño Ruiz

Hablemos de…

Eber Alonso Patiño Ruiz es comunicador social, periodista de la Universidad Católica del Norte Sede Medellin, Antioquia. Su gran pasión es la radio y la escritura. Tiene dos novelas terminadas y una en camino, un libro de cuentos y otro de historias fantásticas; tres libros de poesía: Huellas, Tiempos y Expresión del alma.

@Eber01

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Escalona por un día

Escalona por un día

Muchas veces ha visto o leído que una persona puede ser otra por un día. Sentirse médico, enfermero, militar o sacerdote; en mi c...

La cultura hay que pensarla

La cultura hay que pensarla

Por estos días, con el fin de asistir a algunos foros y eventos académicos donde he sido invitado como ponente, he estado revisando...

Cocina y memoria en los pueblos

Cocina y memoria en los pueblos

  Ayer, mi esposa me pidió que comprara unos bollos de mazorca —los están vendiendo seguido en mi pueblo—. Averigüé dónde se...

El paraco

El paraco

Dos aspectos relevantes constituyen parte de la idiosincrasia vallenata, sus costumbres y comportamiento coloquial. Me refiero, sin dud...

Diez años después de la despenalización del aborto en Colombia

Diez años después de la despenalización del aborto en Colombia

  Cuando se habla de despenalización del aborto en nuestro país, hay que hacer mención a la abogada colombiana Mónica Roa, acti...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados