Opinión
Parangón entre el rÃo y mi vida
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En la parte alta de la cordillera nace el rÃo. Allà es pequeño, corre lento, tÃmido, como temeroso de ser tragado por un abismo y desaparecer.
Nacà débil, después de un gran esfuerzo de mi madre, la comadrona temerosa por mi fragilidad, me acostó al lado de mi progenitora para que me alimentara.
El rÃo evadiendo los grandes peñascos y hondonadas, se abrió su propio camino, rompió montañas, recibió en su cauce arroyos y manantiales que lo hicieron más fuerte.
En mi niñez fui alimentado como un becerro hambriento, los senos henchidos de mi madre no daban abasto para satisfacer mi apetito voraz. ArremetÃa entonces con cuánto alimento surtiera a mi tetero.
El rÃo incursionó en nuevos terrenos, bañó valles, llanuras, pueblos y veredas, ya era adulto, otros rÃos pequeños terminaron rendidos en su cauce.
Tiempo después mi alimento cambió, ahora devoraba, engullÃa, carnes de todo tipo, mi cuerpo cambio, me sentÃa fuerte y desafiaba a la vida.
Ahora el rÃo era apetecido, envidiado por dónde no pasaba, sintiéndose el rey invencible, ahora corrÃa caudaloso y sereno.
Yo también era el rey. Por donde andaba, conquista y conquista me hicieron sentir el Don Juan de mis tiempos.
De repente el rÃo sintió miedo, quiso retroceder pero su caudal voluminoso se lo impedÃa. No habÃa nada que hacer, al frente estaba el inmenso mar con su boca abierta para tragárselo con sus aguas infinitas. A punto estaba de desaparecer para siempre.
Mi andar fue perdiendo fuerzas, ya no soy el bailarÃn de las fiestas, tampoco el Don Juan de antaño, ahora me agobian dolores, malestares y mi corazón cansado ya no puede retroceder el tiempo. Como el rÃo, también terminaré vencido por el más allá desconocido.
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Arnoldo Mestre Arzuaga
Sobre el autor
Arnoldo Mestre Arzuaga
La narrativa de Nondo
Arnoldo Mestre Arzuaga (Valledupar) es un abogado apasionado por la agricultura y la ganadería, pero también y sobre todo, un contador de historias que reflejan las costumbres, las tradiciones y los sucesos que muchos han olvidado y que otros ni siquiera conocieron. Ha publicado varias obras entre las que destacamos “Cuentos y Leyendas de mi valle”, “El hombre de las cachacas”, “El sastre innovador” y “Gracias a Cupertino”.
1 Comentarios
Nunca te dejes vencer por el tiempo, autor,las aguas del rÃo nunca son las mismas,tu vida se renueva de forma constante,al igual que el rÃo, con las más inesperadas de las sorpresas, ff.
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