Opinión

Yo tuve una maestra

Arnoldo Mestre Arzuaga

27/05/2020 - 04:10

 

Yo tuve una maestra

 

Yo tuve una maestra hace muchos años, pero todavía me acuerdo de ella. Era una hermosa jovencita y yo un niño de apenas seis años. Recuerdo que era diferente a las mujeres del pueblo, lucía siempre hermosa y su arreglo corporal era diferente al de las otras mujeres, su rostro lucía fresco, y su gran altura era cómplice de su belleza, todo le lucía y, por donde pasaba, dejaba un agradable aroma de mujer bonita. Recuerdo que un profesor la pretendía, y a ella no le disgustaban sus pretensiones, ella era vallenata y el llegó de la tierra del banano, era un hombre vivaz y, en poco tiempo, la conquistó. Más tarde se casaron y engendraron una linda familia.

Eneida Martínez nunca olvido al niño que le llevaba papelitos a su enamorado y Miguel Maldonado, donde me veía, me sonreía con picardías. Los años fueron trascurriendo y no volví a ver más Eneida. En una ocasión, que tomé un taxi, el chofer me reconoció, había sido un antiguo compañero, alumno también de Eneida. Enseguida empezó su conversación hablándome de la profesora Eneida y finalizó diciéndome que ella le había dicho cómo era yo de ingrato, que en mis escritos nunca la había nombrado. La verdad que sentí nostalgia, la recordé debajo de un paraguas, para protegerse del inclemente sol, vino a mi mente su hermosa figura y su amabilidad para tratarme. Yo mismo me vi detrás de ella, con mi maletín de cuero, con mi cabello rojizo y mis pecas que me avergonzaban, creo que lloré por dentro, y sólo le pregunté: ¿Sabes dónde vive Eneida? Con detalles, me indicó su dirección.

Faltaban pocos días para el lanzamiento de mi novela, “Gracias a Cupertino”, ya todas las invitaciones estaban repartidas, de modo que rompí un sobre de uno de los invitados, saqué la invitación y la metí en un nuevo sobre con la etiqueta, Señora Eneida Martínez.

El día del lanzamiento, cuando todo el mundo iba entrando, la vi. Era poco lo que había cambiado, aun lucía hermosa, hice como si no la hubiera visto y seguí directo hasta ponerme frente al auditorio. Primero di las gracias a todos por la asistencia y, después, concluí, con nosotros se encuentra una persona muy especial para mí, con quien aprendí mis primeras letras, Eneida por favor ponte de pie. Para ella esto fue una sorpresa. De repente, se volvió la invitada más importante del auditorio, bajé y le di un fuerte abrazo, sentí el latir de su corazón emocionado, alguien del público por molestar habló duro para que lo escucharan: el alumno se ve más viejo que la profesora.

En el día del maestro, quise recordar a la seño Eneida, y desde este encierro obligatorio le envío un gran abrazo.

 

Arnoldo Mestre Arzuaga

Sobre el autor

Arnoldo Mestre Arzuaga

Arnoldo Mestre Arzuaga

La narrativa de Nondo

Arnoldo Mestre Arzuaga (Valledupar) es un abogado apasionado por la agricultura y la ganadería, pero también y sobre todo, un contador de historias que reflejan las costumbres, las tradiciones y los sucesos que muchos han olvidado y que otros ni siquiera conocieron. Ha publicado varias obras entre las que destacamos “Cuentos y Leyendas de mi valle”, “El hombre de las cachacas”, “El sastre innovador” y “Gracias a Cupertino”.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El documental de Diomedes no es sobre su vida

El documental de Diomedes no es sobre su vida

  Cuando uno va a ver un documental sobre la vida y obra de una persona, lo mínimo que espera es que cubran desde su nacimiento hast...

¡Cuidado, el lobo acecha!

¡Cuidado, el lobo acecha!

En estas semanas hemos asistido al espectáculo más grotesco que se pueda presentar en campaña política alguna, trapos sucios al sol...

La Cultura: ¿Cenicienta o desafío?

La Cultura: ¿Cenicienta o desafío?

  La Ley General de Cultura, Ley 397 de 1997, acogió la definición de cultura propuesta por la UNESCO: “en su sentido más ampl...

La Violencia que no para

La Violencia que no para

  Vale la pena recordar por qué se eligió el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contr...

La pesca milagrosa de Mr. Trump

La pesca milagrosa de Mr. Trump

Desde que comenzó la era bolivariana en Venezuela, he venido haciendo seguimiento a la noticia, y como es mi costumbre, lo hago desde ...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados