Opinión

Gracias y hasta pronto, Asawaa

Asawaa, un emprendimiento que también promocionó el departamento de la Guajira / Foto: Asawaa

“Nadie habla del emprendimiento como supervivencia

y eso es exactamente lo que es y lo que mueve el pensamiento creativo”

Anita Roddick

En la Guajira pasan cosas buenas y muchas de ellas son paridas por vientres creativos como el de Ana Lucía Ballesteros, quien en alianza con su esposo Thomas Lorenzen tomó la decisión de cerrar un ciclo en Dinamarca para llegar a su amada Guajira a emprender y a tejer ideas apasionadas basadas en el gran amor por su útero existencial; su retorno no fue a Colombia sino específicamente a La Guajira, ella no aceptó oportunidades laborales ofrecidas en otras ciudades, porque su propósito era emprender en su tierra.

De este modo, nació su primogénito Asawaa, el cual siempre describió como un emprendimiento para promocionar el departamento, a través de productos de calidad locales, incluyendo el licor artesanal Guajiro y aperitivo de Iguaraya, los recorridos por el territorio, el café orgánico, las camisetas, los pocillos y un sinnúmero de productos que nos recordaron que “hay algo que nos une en La Guajira” y que tenemos todas las razones para “hablar bonito de la Guajira”. Esas narrativas repletas de amor por nuestra cultura inevitablemente estremecen y describen perfectamente el espíritu apasionado y brillante de Ana, a quien por fortuna la vida me la ha regalado como amiga y tuve la oportunidad de pujar con ella desde la sororidad este gran parto #PorLaGuajira llamado Asawaa, un reservorio de esperanzas por una tierra que no en vano, es la única que se escribe en femenino entre 32 departamentos, un femenino resiliente y creativo.

Hoy escribo desde la nostalgia y el duelo abierto como las venas de Latinoamérica, por tener que darle un hasta luego a uno de los emprendimientos más inspiradores y poderosos que han surgido en La Guajira, uno que demostró que podemos unirnos en torno a las cualidades del territorio, a la recuperación de nuestra autoestima regional y a la importancia de vivirnos desde la ciudadanía activa.

Ana y su equipo de trabajo nos dieron el ejemplo más claro de que el camino es tener sueños y no descansar hasta convertirlos en realidades transformadoras, mujeres como ella motivan a seguir en la causa social y a movilizarnos hacia la convicción de no rendirnos.

Ana Lucía Ballesteros: la tejedora de esperanzas por La Guajira

Mucho se puede decir de ella, es sincera, inquieta, creativa, de una calidad humana admirable, amiga leal y visionaria innata. Es Máster en Estudios del Desarrollo con enfoque en Emprendimiento Social de la Escuela de Negocios de Copenhague en Dinamarca con beca otorgada por la misma universidad. Con tesis nominada a honores titulada: “Energía Eólica para el Desarrollo Sostenible”.

Pero su más lindo diploma de vida, es el de ser una guajira enamorada de su tierra, dispuesta a darlo todo para aportar a su transformación, por ello, desde 2015, lideró el emprendimiento Asawaa. Además, junto a su equipo, y gracias al apoyo de creyentes de La Guajira, logró que Asawaa mostrara los atractivos de nuestro departamento alrededor del mundo, llegando a países como Canadá, Estados Unidos, Alemania, Dinamarca, España, Grecia, Italia, Chile, entre otros. Hoy son muchas las personas que han tejido una tertulia con un coctel con sabor a iguaraya, han portado sus camisetas o han llegado a conocer La Guajira motivados por Asawaa; porque nunca fue una comercializadora de licor, sino una plataforma turística y de amor de la más alta pureza por un territorio que merece comenzar a vivir como lo que es, la cabeza de país, hasta superar las diferentes crisis que la desdibujan de su majestuosidad.

Gracias y hasta pronto Asawaa, estoy segura que volveremos a tenerles porque se reinventarán como el Cardenal (Ave Fénix) guajiro o como los cactus que, a pesar de todas las adversidades, se reverdecen y se mantienen imponentes. Gracias, Ana, por hacernos creer que hay algo que nos une en La Guajira; mi admiración eterna por ti. Adelante, lo creemos, lo logramos.

Fabrina Acosta Contreras

@Facsostac