Gastronomía

La historia de la pizza

La Pizza es reconocida como uno de los platos más codiciados en Colombia, indistintamente de su estatus social. Muchos aman este plato por su versatilidad y la capacidad de atacar al hambre como ningún otro.

Existen algunos datos muy sorprendentes respecto de la relación de los colombianos y la pizza, por ejemplo: el mercado del plato movió unos sorprendentes 365 mil millones de pesos en los últimos años (datos 2017-2022), con un crecimiento mensual de 800 millones. Entre las ciudades que más consumen este plato se destaca Bogotá, con un consumo promedio per cápita de 1.635 pesos, representando el 33% de la producción nacional.

Algunas plataformas de pedidos señalan, además, que los colombianos superan a todos los demás países de América Latina en la cantidad de pizza consumida semanalmente. Mientras que el 11% de los argentinos consume pizza al menos 5 veces al mes, en Colombia el valor es mucho más elevado alcanzando el 49%, dejando atrás además a Perú que alcanza al 20% de los encuestados. Es un testimonio irrefutable del amor por una buena pizza.

Sin embargo, más allá de estas estadísticas, alguna vez se preguntó: ¿cómo surgió este plato? ¿Fue siempre igual o cambió a lo largo del tiempo? A continuación, les invitamos a realizar un recorrido por los orígenes de este plato famoso, que nos remontará a la bella Italia, cuna de esta maravillosa preparación.

Génesis de un plato sabroso  

Los orígenes de la masa y el acompañamiento con tomate y verduras se acreditan a los maestros panaderos de Nápoles, cuna de la pizza. Según los historiadores se preparaba en la calle, con una harina mucho más dura de la que conocemos ahora, de un refinado de 00, casi inexistente en la actualidad. Eso sucedía porque el trigo del sur de Italia era mucho más duro que su contraparte norteña, razón por la cual contenía más gluten y hacía más fácil de preparar el plato.

Adoptada por plebeyos y realeza por igual, el rey Fernando II se hizo construir un horno pizzero en sus tierras para no tener que salir al centro a buscarla. Entonces consumían una variante que consistía en una masa algo más dura que ahora, recubierta con tomate y cebolla, con bastante albahaca cocida como topping. Hay que recordar que la mozzarella que tanto disfrutamos en este plato en la actualidad fue concebida mucho tiempo después, y entonces se usaban algunas variantes de queso de cabra, en algunas casas de mucha riqueza, ya que era considerado un ítem de lujo.

Por otra parte, se conoce que este producto sólo existía en Italia hasta las inmigraciones de finales de siglo XIX en Estados Unidos, momento de la historia en el que decenas de miles de italianos desembarcaron en esas tierras. Desde entonces comenzaron a aparecer centenares de pizzerías a lo largo y ancho de Nueva York, encantando a la “Gran Manzana”. La primera pizzería propiamente dicha de los Estados Unidos se acredita al italiano Gennaro Lombardi, quién abrió su local en 1905 en lo que hoy se conoce como Manhattan.

En la actualidad existen miles de locales con un buen horno pizzero (que en muchos casos es de leña), lo que hace mucho más fácil su preparación que en ataño. Claro que el boom de la pizza en Colombia no sería posible de no ser por el delivery, una de las grandes pasiones colombianas, como el fútbol y las reuniones con amigos.

Verónica Salas

PanoramaCultural.com.co