Literatura
Décimas al medallista olímpico vallenato
Oscar Luis Muñoz Oviedo llegó a Londres como el único representante del taekwondo de Colombia y terminó arrancando una plaza entre los tres mejores en la categoría de 58 kilógramos.
Con sólo 19 años, el joven se ha convertido en una leyenda vallenata y ha contribuido a que Colombia obtenga en Londres 2012 su mejor resultado olímpico de la historia. Por este motivo, el poeta José Atuesta Mindiola le dedica estas décimas que recogen todo el orgullo y la alegría suscitados por su triunfo.
I
Bienvenido campeón
Oscar Luis Muñoz Oviedo,
hay un esplendor muy ledo
que brota del corazón;
orgullo de la Nación
que hace historia en el Cesar,
usted acaba de ganar
medalla en las olimpiadas;
su vida será exaltada
como ejemplo de imitar.
II
Es de bronce la medalla,
para nosotros es de oro,
porque grande es el decoro
como el héroe en la batalla;
su valor tiene la talla
de un patriota convencido
que el deporte es bendecido
para el cuerpo y la salud;
elixir de juventud
que Dios nos ha concedido.
III
En las calles empedradas
barrio “Cola de Caballo”,
fervorosa sin desmayo
y desde la madrugada
la gente bien preparada
confiando en la trayectoria
festejaron la victoria;
sus padres Nancy y Pompilio
abrazados en idilios
a Dios le daban la gloria.
IV
Yo que soy hombre sensato,
dedico mis versos hondos
a este rey del taekwondo
que es orgullo vallenato.
El deporte es el mandato
de la humilde recreación,
bien lo dice la lección:
la disciplina del atleta,
llegar triunfante a la meta
buscando consagración.
José Atuesta Mindiola
0 Comentarios
Le puede interesar
Rosenda cultiva truenos con la lluvia
La aldea es silenciosa, largas las calles y las casas separadas por patios verdes y piedras grandes del color de la tierra. Se l...
La herencia que Luis Mizar dejó a los normalistas de Manaure
Las personas que conocieron en vida al maestro Luis Enrique Mizar Maestre saben que ni en sus bolsillos ni en su cuenta bancaria abun...
El compa Chello
No sé cuál era su verdadero nombre. Es posible que se llamara Eusebio. Todos en el pueblo le decían con cariño, compa chello, y él...
Cuento: Un secreto para ser contado
Este es un secreto que he guardado toda la vida y que hoy después de consultar con mamá y obtener su visto bueno te lo quiero contar,...
La pluma de Gabito: sesenta meses de inmortalidad
Cinco años han transcurrido desde que Gabito cerró sus ojos y puso punto final a su extraordinaria novela de ochenta y siete años de...