Opinión

Editorial: La Afrocolombianidad y el fortalecimiento de una identidad

Redacción

21/05/2012 - 11:44

 

Tras una semana majestuosa en eventos culturales, hemos querido destacar en este editorial la labor de todos los que tratan de dar un espacio honorable a la Afrocolombianidad en el Cesar (y Colombia) y la consolidación de una comunidad que lucha por su reconocimiento y mejora social.

África tiene un peso importante en la cultura colombiana y americana en general. Los afrodescendientes han contribuido notablemente, con el sudor de su frente, en la construcción de la mayoría de los países americanos, desde Estados Unidos hasta Brasil y Argentina.

Por eso, cada una de las actividades centradas en la afrocolombianidad en Valledupar tiene su significado. Es el reconocimiento a un trabajo,  unos aportes culturales destacables, un legado, una forma de ser, una dignidad.

La discusión del plan de desarrollo en el Concejo municipal aclaró la necesidad de dar prioridad en reparar ciertas injusticias y promover el desarrollo de la población afrodescendiente. Pero, también, y como lo comentaba el comunicador social Luis Alberto Díaz, es necesario hacerlo con profundidad y sin egoísmos, sin cerrar los ojos y sin hurgar en las heridas del tiempo.

Las distintas obras de teatro y las tertulias organizadas en la Casa de la Cultura son también un logro aplaudible que presentaron a la Comunidad afro desde otra perspectiva: la del diálogo y el talento artístico.

Es tiempo de entender que la africanidad no se encuentra sólo en algunos ritmos típicos del Caribe colombiano, sino que trasciende también el lenguaje diario, las costumbres, el humor, las calles, todo. El mestizaje ha hecho de Colombia una nación estrechamente ligada a la memoria afro.

Así como lo presentó el artista gráfico Moisés Zabaleta durante  la inauguración de su exposición en la Alianza Francesa, la afrocolombianidad no va en contra de ninguna identidad.

La afrocolombianidad representa una necesidad de conocer y explorar su propia identidad, recordar lo mucho que ha sufrido un pueblo para que los mismos atropellos no se repitan, descubrir y dignificar a sus propios líderes y héroes, porque “si uno se respeta a sí mismo es más fácil que los demás le respeten”.

Queremos destacar en esta columna la admirable labor de María Lydyalu Perea quien, con el respaldo de la Asociación Mujeres en Acción ha permitido la organización de unas jornadas especialmente dedicadas a la Comunidad Afro en Valledupar.

La programación incluía todo tipo de actividades, tanto teatrales como educativas o religiosas, y en palabras del director de la Casa de la Cultura –uno de los grandes valedores de este evento–: fue un éxito rotundo.

Esperemos pues que la Afrocolombianidad siga por ese camino inevitable de rescate de su identidad para el gusto y el futuro de toda Colombia.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El banquete del 75 aniversario del Instpecam

El banquete del 75 aniversario del Instpecam

La palabra banquete proviene del italiano bancheto (banco pequeño) donde la gente se sentaba alrededor de la mesa para consumir los al...

La garantía del proceso electoral

La garantía del proceso electoral

La Ley 996 de 2005, más conocida como Ley de Garantías, es el marco legal donde se establecen los criterios que reglamentan la elec...

A votar 7 veces Sí en la consulta anticorrupción

A votar 7 veces Sí en la consulta anticorrupción

“No hay colombiano que no sepa que la corrupción en Colombia ha llegado a niveles escandalosos” afirma el senador Jorge Enrique Ro...

Quiero

Quiero

  Quiero mirarte con los ojos cerrados, dibujarte sin pinceles ni colores, quiero cantarte sin voz, en silencio, abrazarte sin mis br...

Derechos humanos vs Barbarie

Derechos humanos vs Barbarie

Nos piden paz y cordura, pero de eso nunca nos han dado nada. Jhon  Flórez La historia de esta nación se ha fraguado entre charcos...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados