Opinión

El Grammy vallenato no debe morir

Jorge Nain Ruiz

31/07/2015 - 06:00

 

Pipe Pelaez (izquierda) y Jorge Celedón (derecha) / Foto: Olimpicastereo.com.co

Hay quienes aseguran que cualquier parecido entre La Academia Latina de Artes y Ciencias de la Grabación por sus siglas en ingles LARAS y la Federación Internacional de Futbol Asociado FIFA es mera coincidencia, pero ambas constituyen un negocio muy lucrativo para quienes las dirigen casi de manera vitalicia.

No obstante lo anterior, ello no puede ser óbice para que nuestra música colombiana, y en especial la de la región Caribe, que durante la vida republicana nos ha representado internacionalmente, se quede por fuera de la muestra de diversidad cultural de América latina, que es lo que muy en el fondo busca el Grammy Latino.

Para nadie es un secreto que no fue un buen grupo de artistas del Caribe quienes lucharon a brazo partido, ni mucho menos la unidad de los artistas vallenatos, quienes con gran sacrificio lograron que la academia incluyera la cumbia y el vallenato como área o categoría a premiar, sino que por el contrario al parecer esto se logró gracias al tesón y persistencia del compositor y periodista Félix Carrillo Hinojosa, que casi en solitario le insistió durante varios años a la academia para que incluyera nuestro género y, sin duda alguna, también por la fuerza con la que nuestra música se abre paso día a día en el mundo.

Independientemente de quien o quienes lograron que el vallenato fuese reconocido en los premios Grammys Latinos, lo que no se puede desconocer es que el solo hecho de mencionar en el contexto cultural latinoamericano a un género musical del caribe que nació entre campesinos del Magdalena grande de nuestro país y que aún no ha cumplido un siglo de vida, ya es un logro de grandes dimensiones que no podemos deslegitimar y correr el riesgo de retroceder.

Tengo la impresión que es la misma academia LARAS quien ha lanzado una especie de amenaza o ultimátum a nuestros artistas para que nos apropiemos de esa conquista y luchemos por sostenerla, sin embargo, me preocupa que no estemos lo suficientemente cohesionados como para hacer equipo y cumplir con las exigencias de la academia, que no son sino dos, la primera consistente en un número mayor de afiliados a lo que se denomina también, mayor membresía, y la segunda más entusiasmo para inscribir y postular trabajos musicales a los premios.

La segunda es consecuencia de la primera, luego entonces necesitamos hacer parte de la academia obteniendo la respectiva membresía y dejando de lado las envidias y rencillas parroquiales, en busca del beneficio global que representa el Grammy Latino para la música vallenata.

 

Jorge Nain Ruiz

@JorgeNainRuiz

Sobre el autor

Jorge Nain Ruiz

Jorge Nain Ruiz

Vallenateando

Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.

@jorgenainruiz

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

No todos los saludos valen tanto

No todos los saludos valen tanto

En la pasada entrega de la revista Semana, el polémico y controvertido hombre de la farándula vallenata Álvaro Álvarez –más cono...

Choque de trenes por la Paz

Choque de trenes por la Paz

No sé si se pueda llamar “choque de trenes” como lo hacemos cada vez que se enfrentan las altas cortes entre sí, pero de lo que...

La industria del turismo: entre alegrías y estafas

La industria del turismo: entre alegrías y estafas

  Una vez terminadas las fiestas navideñas en nuestro país, continua el goce del periodo vacacional, y muchas familias colombianas ...

Pajazo mental

Pajazo mental

La humanidad históricamente ha sido víctima (y cómplice) de la politiquería, por eso se escuda en “pajazos mentales” que le res...

Sandra Padilla: A una musical estancia

Sandra Padilla: A una musical estancia

Hablar de Sandra Padilla es contemplar el cauce musical de un río, cuyo cuerpo de agua cantarina besa las curvas del aire sobre las pi...

Lo más leído

Los Pacabuyes: ¿un pueblo Chimila o Malibú?

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Pueblos

La magia de Escalona

Alberto Muñoz Peñaloza | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

El Vallenato de Rafael Escalona

Darío Blanco Arboleda | Música y folclor

Armando Zabaleta: el fecundo compositor de “No voy a Patillal”

Eddie José Dániels García | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados