Opinión

Nocaima Cundinamarca, un pueblo vallenato

Jorge Nain Ruiz

09/12/2016 - 08:10

 

Iglesia de Nocaima / Foto: Nocaima-cundinamarca.gov.co

Hace dos años conocí a John Jairo Escobar presidente del Festival vallenato de Nocaima Cundinamarca, quien desde ese entonces me invitó insistentemente a conocer el pueblo del interior que, según él, ama más al vallenato.

El fin de semana pasado me animé a aceptar la invitación a una parranda nada menos que con Rosendo Romero Ospino, el poeta de Villanueva, y debo confesarles, que no conocía un pueblo en el interior que profesara tanto amor por nuestro folclor.

Una cosa es decirlo y otra es vivirlo y sentirlo. La forma como la gente de ese pueblito –a escasos 66 kilómetros de Bogotá, con un clima templado excepcional– trata a quienes representamos la música que ellos adoran, la hospitalidad y el cariño que profesan a los vallenatos es algo indescriptible. Ahora entiendo por qué decidieron tres años atrás hacer un Festival vallenato bautizado “Panche de Acordeones”.

Me animé más todavía a visitar Nocaima cuando me dijeron que tenían una parranda con un invitado de lujo traído de Villanueva, un compositor de los que nosotros en el Valle quisiéramos tener en un cofre de cristal, porque los de mi generación crecimos y nos enamoramos con sus poemas, cantados por Oñate, Diomedes, el Binomio, Silvio Brito, mi pariente y amigo del alma, Rosendo Romero.

Me fui para Nocaima con parte de mi familia y hasta mis hijos menores disfrutaron de una velada que creo nunca se les olvidará y que quiero describirles brevemente:

La parranda se llevó a cabo en un establecimiento campestre algo retirado del pueblo; se inició bajo una pertinaz llovizna; el aforo del sitio estaba totalmente colmado; al ingresar se respiraba un ambiente familiar a pesar de que no divisábamos rostros conocidos; se sentía camaradería y confraternidad; fuimos conducidos hasta la mesa principal donde nos esperaba con un gran abrazo el único rey vallenato “cachaco” de la Canción Inédita German Villa y el maestro y vallenatólogo Elías Guevara; ya estaba el conjunto de planta en tarima, en el que se notaba que sus integrantes todos era del interior del país.

Llamaron a la tarima al cantautor invitado Rosendo Romero y allí se inició una parranda inigualable, en la cual los asistentes permanecieron, concentrados en escuchar, vivir y corear sus canciones; la euforia se centraba en cuál era el orden para cantar esos éxitos como Fantasía, Mi poema, Noches sin luceros, Me sobran las palabras, Cadenas y muchas otras; terminó el primer set y un grupo de señores con guayaberas blancas que tenían la leyenda Fundación Panche de Acordeones sirvió un exquisito sancocho trifásico, al final de la noche, y, para cerrar con broche de oro, el Poeta me pidió que cantara con él su inmortal obra Mensaje de Navidad; así corroboré que Nocaima es el pueblo de Cundinamarca que más ama al vallenato.

 

Jorge Nain Ruiz

@jorgenainruiz 

Sobre el autor

Jorge Nain Ruiz

Jorge Nain Ruiz

Vallenateando

Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.

@jorgenainruiz

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El encanto de La Guajira conquista a Colombia

El encanto de La Guajira conquista a Colombia

  La Guajira es un departamento con magia desbordante, de eso no hay duda. El 1 de agosto viví en compañía de muchas personas un e...

Editorial: Paseando por las ruinas de Valledupar

Editorial: Paseando por las ruinas de Valledupar

La capital del Cesar se encamina hacia un turismo novedoso: el de las ruinas, pero no son ni precolombinas ni griegas, son las ruinas d...

Derechos humanos vs Barbarie

Derechos humanos vs Barbarie

Nos piden paz y cordura, pero de eso nunca nos han dado nada. Jhon  Flórez La historia de esta nación se ha fraguado entre charcos...

Mi amado país: ¡Aibmoloc!

Mi amado país: ¡Aibmoloc!

  Qué alegría, qué gozo sublime, qué sosiego me inunda cada mañana al despertar en este grandioso país. País en el que sobre...

Personajes y relatos mágicos del Caribe colombiano

Personajes y relatos mágicos del Caribe colombiano

  Signados por la magia del Caribe, el hombre de la costa norte colombiana, mantiene en su oralidad una serie de relatos que dan noti...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados