Opinión

La inmunidad de rebaño

Andy Romero Calderon

04/03/2021 - 04:55

 

La inmunidad de rebaño
Lote del antiguo Idema en Valledupar / Foto: El Pilón

 

Retomando el tema, todavía la ciudadanía se pregunta cómo se logró la inmunidad de rebaño en el Concejo municipal de Valledupar por parte del alcalde Mello Castro para aprobar el proyecto del lote del IDEMA sin contar con un soporte técnico adecuado. Con un proyecto modificado de tal manera que sólo conservó el objeto de ceder el lote a título gratuito, barbaridad sobre barbarie, y que ignoró de manera deliberada el llamado del gremio de los constructores de la ciudad, dejando en evidencia que para los implicados no vale el saber sino el ejercer a gusto, con intereses subrepticios.

En las sesiones extras convocadas por el alcalde se vio de todo: un proponente que centró el balón y él mismo cabeceó y le hizo un autogol a la ciudad, antiestético, quedó mal parado por sus afugias estomacales. Después, el concejal verde, del partido y de la rabia, salió a cantar, pero nada le hizo afinar y cambiar de idea después de un llamado del burgomaestre. Hubo encontrones entre varios cabildantes que exponían vicios en el proceso, pero valieron más los intereses personales debajo de la mesa que el colectivo a favor de la ciudad.

Escuchando los audios de las primeras sesiones de socialización del proyecto, se escuchaban cuestionamientos serios a los soportes de la iniciativa, y discursos emotivos incluso invitando a la administración a retirar el proyecto. Pero, luego, vino el milagro, un llamado que logró inmunizar el rebaño en tiempo récord.

El primer debate fue de mero trámite, las intervenciones fueron utilizadas para travesear entre los partícipes, para luego aplaudir los argumentos de la ponencia. Acto seguido, luego de escuchar algunos interrogantes de Camacol Cesar (que no tuvieron respuesta por parte de la administración), se aprobó la ponencia.

Segundo debate, en esta ocasión la mayoría decidió, al mejor estilo Poncio Pilatos, lavarse las manos, o, mejor dicho, terminar de hacer el mandado y dejar la responsabilidad de lo que pasará con el lote en cabeza del alcalde. Pues, argumentaron que su responsabilidad se limitaba a dar unas facultades y no a revisar si el proyecto a desarrollar es de vivienda o de otro tipo y su impacto para la ciudad. Véase semejante barbaridad: ¿Así custodian los intereses de la ciudad? Aunque ahora quieran librarse de la responsabilidad, es imposible, y debe quedar escrito en mármol que ese día regalaron parte del mayor activo que tiene la ciudad.

Con este nuevo Concejo Municipal estamos sufriendo una nueva decepción, concejales que ni siquiera hablan en las sesiones (bueno, a parte de contestar la asistencia para poder justificar el cobro de las sesiones)

Lo que ya está claro es que el alcalde, además de ver cómo los concejales cuelgan la hamaca, tiene una técnica para lograr la aprobación de sus proyectos.

En el medio, hay un grupo económico nacional que está detrás de la difusión del discurso barato sobre la vivienda para los pobres. Ese grupo, con más de 70 años de existencia, con empresas en el sector financiero, asegurador y de construcción, a ése es obvio que no le interesa Valledupar sino el beneficio económico de sus accionistas, y lo hacen al vender los servicios de crédito hipotecario y seguros a 15 años o más.

Ojo al dato, dos concejos anteriores negaron el mismo proyecto. Y hoy, la tercera es la vencida. Se pregunta uno: si el noble argumento de otorgar vivienda para los pobres no funcionó en el pasado, ¿por qué hoy -en un momento económico atípico - prima el beneficio de un grupo económico nacional, en claro detrimento de las empresas constructoras locales?

Duda: ¿cómo fue que se logró cercenar la capacidad de nuestros concejales para cuestionar, debatir, buscar el beneficio general y no el común?

¡Ay! Santa bendición Alvarado de todos los pájaros y el Billegas.

 

Andy Romero Calderón

@Andy_RomeroC

Sobre el autor

Andy Romero Calderon

Andy Romero Calderon

Vallenato de Guacoche

Vallenato de cédula, guacochero de nacimiento. Ingeniero de sistemas de la Universidad Popular del Cesar. Me gusta la buena crítica y política, sin caer en sus vicios y hasta donde los argumentos me dejen llegar. Amante de la buena música y no de un género en específico. El silencio es, después de la palabra, el segundo poder del mundo.

@andy_romeroc

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

En una calle de Tamalameque

En una calle de Tamalameque

A la margen derecha del río Grande de la Magdalena, fronterizo con Mompox, en el año 1536 Quezada avistó una pequeña ranchería i...

Leandro Díaz, 93 años de leyenda

Leandro Díaz, 93 años de leyenda

  “En adelanto van estos lugares: ya tienen su diosa coronada”. Esto lo escribió Gabriel García Márquez como epígrafe de su o...

La tierra del olvido… ¡Nunca más!

La tierra del olvido… ¡Nunca más!

Mis amigos siempre insisten en que tengo un acento manifiestamente paisa, algo contra lo que ya no peleo, no por considerarlo cierto,...

El vallenato y la pirotecnia

El vallenato y la pirotecnia

  Nuestra música popular conocida en Colombia y ya en otras partes del mundo con el nombre de Vallenato se ha caracterizado históri...

Francisco Villa cabalga de nuevo

Francisco Villa cabalga de nuevo

  Sin lugar a dudas Francisco Villa (Doroteo Arango, 1878-1923) fue uno de los protagonistas más importantes de la Revolución Mex...

Lo más leído

La historia detrás de la canción “La piragua” de José Barros

Alejandro Gutiérrez De Piñeres y Grimaldi | Música y folclor

La Muerte de Abel Antonio

Álvaro Rojano Osorio | Música y folclor

Los mejores comienzos de novela en español

José Luis Hernández | Literatura

El discutido origen de la arepa

Redacción | Gastronomía

Leer no duele

Diógenes Armando Pino Ávila | Literatura

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados