Opinión

Editorial: La huella de Cien años de soledad

Redacción

26/03/2018 - 07:15

 

Mural realizado durante el MacondoFest en el centro histórico de Valledupar / Foto: @Cocreador (Twitter)

 

En su recorrido por el Caribe, y en su parada por la ciudad de Valledupar, el MacondoFest ofreció grandes reflexiones e imágenes poderosas. El Premio Nobel de Literatura volvió a ser el protagonista de las calles y de las conversaciones, de los recuerdos y de la magia, y ése es un logro que debe celebrarse porque también es una invitación a leer su obra.

En el conversatorio “Cien años de soledad, un vallenato de 350 páginas”, la obra insignia de García Márquez destacó como una obra-espejo, de gran hondura poética y literaria, sobre la cual se sienta la identidad de todo un pueblo, una obra que se inspira en cada detalle de la costa Caribe de Colombia.

Se destacó también el vínculo muy estrecho que existía entre el autor y la ciudad de Valledupar, su relación con personas claves como Consuelo Araujo o Rafael Escalona, y su amor por la música vallenata (música que hoy ha ganado en reconocimiento y en exposición).

Pero no nos olvidemos que la iniciativa de este Macondo Fest nace en Italia, gracias a las tempranas gestiones de la Red de Cultura y el Instituto Cervantes de Roma, lo que viene a confirmar que la obra “Cien años de soledad” se ha convertido en una referencia y una cartografía para los lectores que deseen conocer Colombia, o una parte del Caribe y Latinoamérica. 

Muchos viajeros -desde Estados Unidos, pasando por Europa y hasta el extremo oriente- se interesan por Colombia después de haber leído la obra “Cien años de soledad”, o de haberse encontrado con la magia de Macondo en alguna de las obras de Gabo. Y luego, ilusionados, llegan en busca de esa esencia que sólo el escritor de Aracataca supo plasmar con esa intensidad y colorido.  

El reto de la costa Caribe es ahora apoderarse de este legado cultural, artístico y literario, un patrimonio universal, y construir gracias a él un diálogo que permita la elaboración de campañas educativas pero también estrategias turísticas que inviten a los amantes de la Cultura y la Literatura encontrarse con la realidad macondiana.

Es cierto que el Vallenato genera un flujo grande y apasionado de visitantes, pero no subestimen el poder de la literatura.

 

PanoramaCultural.com.co

   

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Territorio y memoria

Territorio y memoria

  Una mujer sabia del pueblo Misak, refiriéndose a la oralidad ancestral de su etnia, decía «Nuestro pasado es el presente», la p...

El que se fue y el que llegó

El que se fue y el que llegó

Se fue el año 2018, para algunos colombianos dejando algunos triunfos, nuevos empleos, algo de prosperidad, nuevos amores, y qué sé ...

El poder de la mujer

El poder de la mujer

  En medio de la discusión provocada en el país cuando el Juez 22 administrativo del circuito judicial de Bogotá, Luis Octavio M...

Territorio, identidad y cultura

Territorio, identidad y cultura

  Llevo varias semanas escribiendo sobre territorio, cultura e identidad, y, para ir cerrando el tema, creo necesario definir un poco...

Los riesgos alternos de la Cultura

Los riesgos alternos de la Cultura

Cada nación, con sus regiones y comunidades, tiene su propia cultura con elementos distintivos a ella asociados. Podríamos observar q...

Lo más leído

La historia afroamericana contada en las canciones de Salsa

Alejandro Álvarez Martínez | Música y folclor

Los Pacabuyes: ¿un pueblo Chimila o Malibú?

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Pueblos

La magia de Escalona

Alberto Muñoz Peñaloza | Música y folclor

El Vallenato de Rafael Escalona

Darío Blanco Arboleda | Música y folclor

Armando Zabaleta: el fecundo compositor de “No voy a Patillal”

Eddie José Dániels García | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados