Opinión

Atreverse a curar la herida

Ilka Oliva Corado

26/07/2019 - 06:00

 

Atreverse a curar la herida

 

No importa si la primera expresión emerge con miedo, enojo, ira, impotencia o frustración y que por eso retumbe y lance llamas o queme como la brasa; si rasguña, si grita, si llora quejumbrosamente o si lanza puñetazos al vacío; realmente, eso no es lo importante, lo importante es que ha comenzado a curarse la herida. 

No importa que los pasos sean tambaleantes, si se dan tres hacia delante y uno hacia atrás, si se va de lado o en zigzag, lo que realmente importa es ponerse de pie e intentar caminar, aunque al principio sólo se pueda gatear o arrastrarse; en algún momento llegará la fuerza y el equilibrio, y los pasos serán certeros. 

No importa si la crítica viene como olas, como lava, como una tunda o como aguacero, la crítica no es importante, lo de afuera no es importante, lo que realmente importa es la metamorfosis que se está produciendo adentro, cuando comienza a curarse la herida. 

No importa si la mano tiembla y el pulso dibuje con los hilos del pincel un camino encorvado en lugar de un sendero recto, llegará el momento en el que la calma hará de ese lienzo un jardín repleto de girasoles. Y si el jardín no se da, y si en lugar de girasoles son piedras, rosas o vestigios de una cabaña a donde se llega por un camino encorvado, no importa. Lo primordial nunca ha sido el pasador de la ventana, sino la ventana por sí misma que permite ver todo lo que cuatro paredes no. La expresión es eso, es la ventana del alma y al abrirla se cura la herida. 

No importa si el texto de un relato, artículo, ensayo o poema, no tienen el contexto, la profundidad y la gramática adecuados, llegará el momento en que sean adecuados para otros, o tal vez nunca suceda, pero eso no es lo importante, lo importante es que sean el camino para mermar la necesidad de quien lo escribe en ese momento, porque es vital para curar la herida. Lo importante es curar la herida no lo que piensen otros. Todo lo demás es secundario. 

Porque solo curando la herida la expresión se torna en alegría, en calma y en felicidad. Llegará el momento en el que no dolerá más, será para entonces, pero para mientras -aunque duela- la resistencia está en atreverse a curar la herida. 

 

Ilka Oliva Corado

Sobre el autor

Ilka Oliva Corado

Ilka Oliva Corado

Crónicas de una inquilina

Escritora y poetisa. Ilka Oliva Corado nació en Comapa, Jutiapa, Guatemala, el 8 de agosto de 1979. Hizo estudios de psicología en la Universidad de San Carlos de Guatemala, carrera interrumpida por su decisión de emigrar a Estados Unidos en 2003, travesía que realizó como indocumentada cruzando el desierto de Sonora en el estado de Arizona. Es autora de dos libros: Historia de una indocumentada travesía en el desierto Sonora-Arizona, y Post Frontera.

@ilkaolivacorado

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Mejor, imposible

Mejor, imposible

No tengo la menor duda de que el propósito de internacionalizar la música vallenata y de llevarla no sólo a los países vecinos, sin...

La miseria rueda en dos llantas

La miseria rueda en dos llantas

Cuando exclamamos que “el diablo anda suelto”, es porque nos está tocando caminar con él en las mismas calles. La necesidad con...

Democracia a prueba de fuego

Democracia a prueba de fuego

  El proceso electoral que tuvo lugar el pasado 29 de octubre de 2023, dónde se escogieron a través de las urnas a los nuevos manda...

Dolor de patria

Dolor de patria

  Si hay una situación verdaderamente lamentable para un ser humano, es tener que abandonar el lugar donde vive, donde tuvo una fa...

Buen trabajo el de Silvestre

Buen trabajo el de Silvestre

Como lo prometí en la columna anterior, hoy, después de degustar y saborear el  trabajo musical “Sigo Invicto” de Silvestre Da...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados