Música y folclor

“¿Qué está pasando con el vallenato que ya no se parece?”

Mónica Pulido

05/12/2013 - 11:30

 

Durante la presentación al Consejo Nacional de Patrimonio [del PES para la salvaguardia del Valenato], algunos de los portadores de la manifestación entonaron sus cantos y versos con un gran sentimiento solicitando la inclusión a la lista y reconociendo la necesidad de ser preservada y protegida.

-“Compadre Chendo: Usted que sabe componer sus versos que a mí me gustan tanto, ¿Qué está pasando con el vallenato que ya no se parece?”.

Este interrogante, expresado por un campesino cordobés al maestro Rosendo Romero Ospino, es una de las preocupaciones identificadas por la mayoría de las generaciones, anteriores a la actual, asentadas en la región Caribe colombiana.

Se trata de una de las tantas evidencias que muestran el peligro de desaparición en que se encuentra una de las manifestaciones de mayor arraigo y representación de la identidad regional cultural: la música vallenata tradicional de Colombia, nacida del espíritu de los pobladores caribeños.

La música vallenata tradicional es un género musical cantado, nacido de la confluencia de tres expresiones culturales diversas: los cantos de vaquería y los cantos responsoriales de los campesinos y esclavos negros durante el período colonial, las músicas de gaitas y maracas junto con las expresiones dancísticas de los indígenas nativos de la costa Caribe colombiana, y el aporte del lenguaje textual y los instrumentos musicales europeos, entre los que se destaca el acordeón diatónico.

Este último instrumento es el líder de la identidad musical vallenata, y es acompañado rítmicamente por la guacharaca, de origen indígena, y por la caja, un tambor de origen africano, para dar paso a la creación de cuatro aires rítmicos: el paseo, el merengue, la puya y el son.

Se espera que la salvaguardia de la música vallenata tradicional, contribuya a fortalecer el interés de las nuevas generaciones por la raíz tradicional del género, su función integradora dentro de la sociedad y su labor comunicadora y crítica de la historia y el acontecer cotidiano.

Al salvaguardar una expresión tradicional que canta a la vida desde la contemplación de la naturaleza, con un nexo indiscutible con la realidad de la comunidad, la música vallenata tradicional encontrará medios y canales de difusión que mostrarían, ante propios y extraños, su verdadera esencia.

Estimularía, a su vez, un proceso evolutivo, que sin demeritar sus formas e influencias, conservaría la esencia narrativa y romántica, que da cuenta del lenguaje, las costumbres y la propensión al canto y a la poesía de los hombres y mujeres de la comunidad involucrada.

 

Mónica Pulido


0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Altos del Rosario, el son más interpretado en el Festival de la Leyenda Vallenata

Altos del Rosario, el son más interpretado en el Festival de la Leyenda Vallenata

  Gilberto Alejandro Durán Díaz, el primer Rey del Festival de la Leyenda, ostenta un récord que consiste en ser el autor del Son ...

Chule y Baro: Los hermanos Zuleta

Chule y Baro: Los hermanos Zuleta

  Si hay algo bonito en la vida es el seno familiar. Es el remanso de paz donde a todos los miembros de la familia se les llama por a...

El vallenato no es cualquier cosa, es asunto de amor

El vallenato no es cualquier cosa, es asunto de amor

  Un grupo de importantes y reconocidos intérpretes y creadores vallenatos de variadas tendencias y escuelas, reunidos para reclama...

Habemus Festival Vallenato

Habemus Festival Vallenato

  Desde el año 1968, Colombia tiene de manera ininterrumpida por esta fecha un destino turístico y cultural de gran importancia: el...

Valledupar, seducida por la música clásica

Valledupar, seducida por la música clásica

La “Marsellesa” y el himno de Colombia volvieron a sonar en Valledupar. Esta vez fue el viernes 13 de julio en una noche dedicada a...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados