Música y folclor

Julio Torres: el cachaco que encantó a Bogotá con su guitarra vallenata

Luis Carlos Guerra Ávila

02/01/2024 - 02:55

 

Julio Torres: el cachaco que encantó a Bogotá con su guitarra vallenata
Los Alegres Vallenatos / Foto: Archivo histórico de Bogotá

 

Partiendo de la premisa de que el vallenato que se registró por primera vez fue el de Guillermo Buitrago en guitarra, y trazando una ruta que nos revela su influencia en el folklore, resaltamos a este distinguido rolo, seguidor del maestro.

Nos transportamos a la década de los años cuarenta (1940) a la ciudad capital de nuestro país, Bogotá, y encontramos que los cachacos -o rolos- también se interesaron por interpretar y componer música vallenata en guitarra. Cabe anotar que esas fechas fueron trascendentales para el cambio político de Colombia, pues se vivieron varios episodios trágicos como el asesinato de Jorge Eliecer Gaitán.

En esa época estaban seis canciones pegadas en la radio, las cuales eran muy populares: (1) "Sal si puedes" del maestro Lucho Bermúdez, (2) "A la carga" de Pacho Galán (Orquesta de Eduardo Armani), (3) "El testamento" de Rafael Escalona (Trío Guillermo Buitrago), (4) "Cafetín de Buenos Aires" de Enrique Santos Discépolo y Mariano Mores (Interpretación de Edmundo Rivero), (5) "Navidad Negra" de José Barros (interpretación de Leonor González Mina), y (6) "Rollin’ Stone" de Muddy Waters.

Entre tangos, boleros. blues, porros y vallenatos ya grabados, se entretenía la sociedad bogotana, alcanzando los primeros lugares en fiestas y emisoras. A finales de 1948 se movía en los corredores de la música bogotana un joven rolo con gran influencia artística y de una importante trayectoria musical.

La Bogotá de entonces era una ciudad pequeña, pacata y casi conventual, que se abría tímidamente a la modernidad. Tras el asesinato de Gaitán, y quizás para exorcizar tantas desdichas y tragedias, los cachacos se entregaron con frenesí a bailar el porro y la cumbia. En una urbe de pasillos y torbellinos, de literatos y poetas, en las emisoras se trillaban una y otra vez los “vallenatos” en guitarra de Guillermo Buitrago. Tal fue el escenario artístico musical, por decirlo de alguna manera, en que creció la generación de finales de los cuarenta. Y claro, entre ellos estaba Julio Torres.

Julio se había convertido en el artista revelación en Bogotá e incluso en México y Venezuela. Su música se escuchaba en las emisoras, en La Voz de la Victoria, en Nuevo Mundo, en La Nueva Granada, y sus discos se vendían "como pan caliente". Había nacido el 27 de marzo de 1929 en la familia conformada por Julio Torres Parra y Rosa María Mayorga. Su padre fue pianista y pariente de la famosa actriz y cantante bogotana Sofía Álvarez.

A la edad de 21 años, Julio Torres contaba con las dos canciones más escuchadas en los años cincuenta y las más populares oídas por radio: “Los camarones” y “El aguacero”. Gracias a los alegres ritmos costeños la música colombiana domina en esos días, entre ellos la guitarra vallenata, aún sobre los ritmos extranjeros cantados por el trío Los Panchos.

Alternando su trabajo como almacenista-jefe de la cooperativa de trabajadores de Avianca, con frecuentes y asiduas presentaciones en radio y en fiestas familiares, Julio Torres empezó a componer lo que era conocido entonces como “música caliente”, es decir, porros, cumbias y merengues.

Para las grabaciones, Julio se hizo acompañar de un conjunto integrado dos años antes por varios de sus amigos: los barranquilleros Homo y Custodio Morales, Eliseo Márquez, José Mejía y Jorge Rojas (acordeón, dos guitarras, guacharaca y bongó). Los Alegres Vallenatos. Es posible que hubiera sido en homenaje a Guillermo Buitrago, a quien Julio admiraba, y quien se hizo conocido en Bogotá por la canción “Víspera de año nuevo”.

Un 30 de diciembre de 1950, desde el aeropuerto de Techo, partió hacia Cartagena, pues no conocía el mar y ése era su mayor deseo. Viajó de incógnito para no sentir el asedio de los periodistas y así poder estar más tranquilo. Lo acompañaron Olga Vergara, su novia, y sus cuñados, Estela y Germán. Se hospedaron en el Hotel Cartagena y al tercer día de llegar salieron a bañarse. Él se puso a cantar "La vieja Sara", de Rafael Escalona, y estando en eso le dijo a Olga “que se sentía como mal”, y al momento se fueron a bañar.

Me cuentan, porque yo no vi nada de eso (lo supe por una entrevista a una hermana de Julio de nombre Marina), que estando todos ya en el agua, apareció de pronto una ola inmensa y los dispersó. Y entonces Julio, al ver que la ola se llevaba a Olga, la agarró, pero no pudo sostenerla, y la ola se lo llevó a él. Revela el dictamen médico de la autopsia: "muerte por inmersión".

El 3 de septiembre de 1951, pocos meses después de su fallecimiento, la fábrica de discos Sello Vergara anunció en el diario El Espectador el lanzamiento póstumo de la parranda “Me alejo, ay ay ay”, cantada por Julio Torres y Los Alegres Vallenatos, prensada en un disco de 78 revoluciones por minuto con el número 2019A y por el reverso con el paseo Las margaritas, cantado por Ángel Fontanilla y el Trío Fonseca. El breve artículo periodístico remataba así: “cabe anotar que el malogrado compositor bogotano dejó grabadas un gran número de sus composiciones, las cuales han sido verdaderos hits (…) piezas que no sólo han tenido gran éxito en el país sino en el exterior, en donde el nombre de Julio Torres ocupa un lugar destacado entre los compositores latinoamericanos”.

He aquí una gran historia que se vivió en las dos últimas décadas de los cuarenta y los inicios de los cincuenta. Al igual que Buitrago, su vida musical fue corta pero muy exitosa. Fue un cachaco, rolo, que incursionó en el género vallenato interpretando la guitarra, y es desconocido para muchos folcloristas del vallenato en guitarra. Julio Torres era Hermanastro de Nelson Diaz, fundador de los 50 de Joselito.

 

*Creditos: Archivo histórico de Bogotá

 

Luis Carlos Guerra Ávila

Tachi Guerra

Sobre el autor

Luis Carlos Guerra Ávila

Luis Carlos Guerra Ávila

Magiriaimo Literario

Luis Carlos "El tachi" Guerra Avila nació en Codazzi, Cesar, un 09-04-62. Escritor, compositor y poeta. Entre sus obras tiene dos producciones musicales: "Auténtico", comercial, y "Misa vallenata", cristiana. Un poemario: "Nadie sabe que soy poeta". Varios ensayos y crónicas: "Origen de la música de acordeón”, “El ultimo juglar”, y análisis literarios de Juancho Polo Valencia, Doña Petra, Hijo de José Camilo, Hígado encebollado, entre otros. Actualmente se dedica a defender el río Magiriamo en Codazzi, como presidente de la Fundación Somos Codazzi y reside en Valledupar (Cesar).

2 Comentarios


Diomar 02-01-2024 07:23 AM

Excelente nota

Jorge Choppe 03-01-2024 02:27 AM

Excelente. Felicitaciones Tachy. Hará parte de las historias den el banco de datos del festival de música vallenata en guitarra

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