Opinión
La ausencia de ‘Lindo Valledupar’
Construir cultura ciudadana es un puente que nos conduce al conocimiento y cumplimiento de las leyes, al respeto por los demás, a la convivencia y a la solidaridad, y al fortalecimiento de la identidad cultural y el sentido de pertenencia.
Estos elementos de la pedagogía para la formación del buen ciudadano eran los ejes temáticos del programa radial ‘Lindo Valledupar’, dirigido por el connotado líder cívico, Orlando Velázquez García. Durante dos años estuvo educando a los vallenatos.
De lunes a viernes, en el horario de dos a tres de la tarde por una emisora local y en el segundo año, de una a dos por otra emisora, se desarrollaba el programa; la participación masiva de los oyentes reflejaba la buena aceptación.
La verdad, era un programa diferente, respetuoso e independiente de partidos políticos, su misión era promover la pedagogía del civismo y la tolerancia. Uno de sus eslóganes era: “este programa es para construir cultura ciudadana”.
El señor director en compañía de tres jóvenes periodistas, ilustraban a los oyentes sobre diversos aspectos de la historia y el amor por la ciudad de Valledupar, el respeto por la conservación y protección del miedo ambiente, por las normas de tránsito y el derecho de todos los ciudadanos de disfrutar de un ambiente saludable sin contaminación auditiva ni visual, el derecho a la seguridad, al beneficio de los buenos servicios de agua, alcantarillado y de luz.
El programa era un canal abierto para que los oyentes expresaran con respeto las problemáticas de su entorno residencial, de su barrio o de la ciudad, y el señor director tomaba la vocería de la comunidad y gestionaba las soluciones ante las entidades correspondientes.
Como oyente de ese programa doy testimonios de su defensa por el medio ambiente, por los árboles de Valledupar, por el rio Guatapurí, por la seguridad y la tranquilidad ciudadana, por la defensa del espacio público, por el derecho de la movilidad de los peatones y el deber de los conductores de respetar las normas. El programa era fiel a su nombre, su objetivo era hacer más lindo a Valledupar y educar para la vida a nuestros niños. El doctor Velázquez conoce los alcances del pensamiento pedagógico: “Educa al niño, para que no haya necesidad de castigar al hombre”.
Pero lo lamentable es que este programa cívico, de defensa de nuestro patrimonio forestal y cultural, haya salido del aire por falta de presupuesto. Se cansó el señor director porque no encontró el respaldo del gobierno ni de la empresa privada.
Hacemos un respetuoso llamado a la Administración Municipal y Departamental, y a entidades como La Cámara de Comercio y Comfacesar para que patrocinen este programa y Vuelva el Doctor Orlando Velázquez con la misión de hacer de Valledupar una ciudad más amable y agradable para todos y formar ciudadanos para el respeto y la convivencia. Invertir en la educación es invertir para la paz.
José Atuesta Mindiola
Sobre el autor
José Atuesta Mindiola
El tinajero
José Atuesta Mindiola (Mariangola, Cesar). Poeta y profesor de biología. Ganó en el año 2003 el Premio Nacional Casa de Poesía Silva y es autor de libros como “Dulce arena del musengue” (1991), “Estación de los cuerpos” (1996), “Décimas Vallenatas” (2006), “La décima es como el río” (2008) y “Sonetos Vallenatos” (2011).
Su columna “El Tinajero” aborda los capítulos más variados de la actualidad y la cultura del Cesar.
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